He tenido la suerte de pasar dos fines de semana seguidos en dos capitales europeas distintas, en las dos me encuentro ceniceros en la calle, en las puertas de los bares. Me pongo radical y digo que esa opción tampoco me gusta??? uhmm.... pues no, no me gusta pero no me parece tampoco coherente prohibir fumar en la calle, a pesar de que no me guste pasar por delante de esas puertas humeantes, ajajajjaja. Es un buen sitio para conocer gente, como la música no se oye es más facil hablar, jajajaja así que fumadores y fumadoras a ligar a la puerta de los bares !!!
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